La relación entre el VIH, la testosterona y el hipogonadismo
La testosterona es la principal hormona masculina y actúa sobre el deseo sexual, la erección y la actividad física y mental. En 2022, M. Lachâtre y cols han publicado un estudio científico que señala que, en hombres jóvenes-mediana edad con VIH, que reciben un adecuado tratamiento con antiretrovirales presentan con mayor frecuencia un déficit de testosterona (hipogonadismo).
Este artículo escrito en noviembre de 2022 por el Dr. Luis Rodríguez-Vela, Director del Instituto de Urología y Medicina Sexual de Zaragoza. Soy especialista en Urología y Andrología desde hace más de 30 años y tengo amplia experiencia en el diagnóstico y tratamiento de hombres con déficit de testosterona.
¿Qué entendemos por hipogonadismo?
Hipogonadismo significa déficit de testosterona. La testosterona se produce fundamentalmente en los testículos y está regulada por una hormona denominada LH que se libera en la hipófisis (cerebro).
Cuando la testosterona baja suele producirse un descenso del deseo y de la actividad sexual. Además, este descenso de la libido suele acompañarse de disminución de las erecciones matutinas y de la rigidez del pene.
El déficit de testosterona también puede acompañarse de un descenso de la actividad física y de la masa muscular, así como un aumento de la cintura abdominal. La testosterona también actúa en el cerebro y su déficit suele ocasionar una mayor tendencia al cansancio mental, perdida de memoria, malhumor, etc.
¿En qué consiste el trabajo de Lachâtre?
Estos autores han estudiado 214 hombres de 18 a 50 años, con VIH bien tratado y controlado con antiretrovirales (cART). Los doctores han observado que el 8,7% de estos hombres jóvenes-mediana edad presentan un déficit de testosterona libre (hipogonadismo).
En todos los casos se trataba de un hipogonadismo secundario, es decir, se produce poca LH en la hipófisis. Al descender la LH no se estimula adecuadamente la producción de testosterona en los testículos y se desencadena un déficit de testosterona.
En nuestra cartera de servicios, en el apartado descenso del deseo sexual y en el artículo publicado en la sección de noticias “déficit de testosterona: nuevo tratamiento” exponemos cómo se regula la producción de testosterona y la diferencia entre y hipogonadismo primario y secundario.
¿Qué conclusiones ofrece este trabajo?
- La incidencia de hipogonadismo en estos pacientes jóvenes es del 8,7% (mayor que la población en general de esta edad).
- Afecta con mayor frecuencia a varones:
- Mayores de 43 años
- Tendencia a la obesidad
- En tratamiento con efavirenz
- En hombres que están en tratamiento con antiretrovirales se aconseja un screening temprano de la testosterona y de la LH. Así, identificaremos precozmente casos de hipogonadismo y podremos tratarlos adecuadamente y así mejorar su vida sexual y aumentar su calidad de vida.
Si tengo descenso del deseo o de la erección, ¿qué puedo hacer?
Debe consultar con un urólogo experto en medicina sexual (uro-andrólogo) acostumbrado a tratar pacientes con déficit de testosterona. En el Instituto Urología y Medicina Sexual de Zaragoza ofrecemos un estudio integral de la salud del varón. El diagnóstico debe basarse en una historia clínica completa y en una adecuada exploración física.
Cuando existen síntomas que sugieren un Déficit de Testosterona realizaremos un análisis de sangre determinando: LH, Testosterona total, albúmina y SHBG. Con estos datos calcularemos la Testosterona Libre que es un parámetro muy importante a la hora de decidir el tratamiento.
La cifra de LH nos ayudará a distinguir entre un hipogonadismo primario (origen testicular – LH alta) o hipogonadismo secundario (origen hipofisario – LH baja).
¿Cómo se puede tratar el hipogonadismo?
Existen dos tipos de hipogonadismo y el tratamiento debe ser personalizado para cada paciente.
- En hombres con hipogonadismo primario (testosterona baja y LH alta) el único tratamiento es la administración de testosterona en forma de gel o en inyección intramuscular (cada 3 meses). En nuestra cartera de servicios, en el apartado descenso del deseo sexual, exponemos cómo se administra un tratamiento de sustitución con testosterona.
- En varones con hipogonadismo secundario (LH baja y testosterona baja) podemos administrar fármacos que estimulen la producción de LH en la hipófisis. En pacientes con hipogonadismo secundario si administramos gel de testosterona, clínicamente responderán bien, pero la testosterona administrada bloqueará la LH y disminuirá la producción de testosterona y de espermatozoides en los testículos.
¿Cuáles son los mejores tratamientos para el Hipogonadismo secundario?
El citrato de clomifeno es un medicamento que actúa sobre el eje hipotálamo-hipófisis provocando un aumento de la liberación de LH (estimula la producción de testosterona) y de FSH (estimula la producción de espermatozoides).
En 2010 Taylor y en 2014 Ramasamy publicaron que el tratamiento con citrato de clomifeno en pacientes con déficit de LH y de testosterona producía un aumento de la LH y de la testosterona hasta niveles normales. Esta normalización de la testosterona se traducía en una mejoría de la clínica de los pacientes con Hipogonadismo secundario.
En 2020, Krzastk estudia la eficacia y seguridad de clomifeno a largo plazo en pacientes con hipogonadismo secundario. Los resultados fueron los siguientes:
- 88% normalizaron las cifras de LH y de testosterona.
- 77% consiguieron una mejoría significativa de sus síntomas.
- 8% presentaron efectos adversos leves (cambios de humor, aumento de sensibilidad mamaria).
El resumen de este magnífico artículo es que es el tratamiento con citrato de clomifeno en varones con hipogonadismo secundario es eficaz y seguro a largo plazo.
En el Instituto Urología y Medicina Sexual de Zaragoza, en varones con hipogonadismo secundario aconsejamos tratamiento con citrato de clomifeno. En la gran mayoría de los casos conseguimos una elevación de la LH, una normalización de los niveles de testosterona y lo más importante, una mejoría muy marcada del deseo sexual, la erección y la actividad física.
Resumen final y explicación del estudio
- Los hombres jóvenes-mediana edad con VIH, que reciben un adecuado tratamiento con antiretrovirales presentan mayor incidencia de déficit de testosterona (hipogonadismo).
- En varones que toman antiretrovirales se aconseja un screening temprano de testosterona y LH para identificar precozmente casos de hipogonadismo.
- En casos de hipogonadismo primario se administra un tratamiento sustitutivo con testosterona y un adecuado control médico.
- Los varones con hipogonadismo secundario pueden ser tratados con citrato de clomifeno que induce la liberación de LH y de esta manera, se estimula la producción de testosterona en los testículos de forma natural.
- Nadie debe auto-administrarse testosterona ni clomifeno. Si presenta síntomas debe acudir a un uro-andrólogo experto.